El anillamiento científico consiste básicamente en la captura de un ave y su marcado con una anilla, normalmente en la pata.
En el caso de la becada se utiliza una anilla metálica y también se anotan una serie de datos biométricos del ave, tales como el peso, la longitud del ala, pico, tarso y cola, así como la condición general del ave determinada por el desarrollo muscular y cantidad de grasa acumulada.
Tras una cuidadosa manipulación el ave es liberada de inmediato con el fin de evitar un estrés innecesario. El proceso no lleva más de cinco minutos. Cada anilla contiene un código alfanumérico único, lo que permite identificar toda ave anillada a lo largo de su vida.
Otra información que nos proporcionan las becadas a través de la observación de ciertas plumas del ala es su edad (joven o adulta) y en algunos casos de becadas adultas incluso podemos llegar a determinar el año de su nacimiento.
El anillamiento científico es una actividad realizada por personal debidamente formado y debe contar con la preceptiva autorización tanto de la oficina de anillamiento como la administrativa de la Comunidad Autónoma donde se desarrolla su actuación. En el caso de La Casa de la Becada contamos con varios anilladores pertenecientes al grupo “Scolopax” avalados por la Oficina de Anillamiento de Aranzadi.
La función principal del anillamiento es determinar el origen y destino de un ave, su longevidad y en el caso de aves cinegéticas, la presión de caza, estimada a partir del porcentaje de aves anilladas que son recuperadas por la acción de caza.
El marcaje de becadas con anillas es uno de los proyectos prioritarios que se van a realizar en La Casa de la Becada. Para ello, en años anteriores se han estudiado las diferentes praderas de alimentación donde acuden las becadas por la noche con el fin de determinar los mejores lugares para su captura.
El hecho de que La Casa de la Becada sea una reserva va a permitir realizar una comparativa entre el índice de supervivencia de estas aves en terrenos cinegéticos respecto a aquellos en los que no se caza, por lo que ayudará a entender el papel de las reservas en la gestión sostenible de la especie.
Además, al situarse este lugar en un importante corredor migratorio facilitará el conocimiento de las rutas utilizadas por las becadas y el papel estratégico de estos lugares para las recuperación de estas aves en sus viajes entre el norte de Europa y la Península Ibérica.
Otro de los objetivos marcados es que La Casa se convierta en una escuela de formación para nuevos anilladores de becada, así poco a poco se vaya ampliando el plantel de personas dedicadas a esta actividad y nos pongamos a la altura de otros países europeos en número de becadas anilladas.
Desde la Comisión de Anillamiento del CCB te pedimos que si cazas una becada anillada la comuniques al correo casabecada@ccbp.org