Hacíamos mención en la última entrada de este blog a la discreta entrada de becadas que hasta el momento se había producido en la Casa de la Becada, destacando el elevado porcentaje de becadas adultas capturadas en las sesiones de anillamiento y también al notable número de aves recuperadas con anilla, síntoma de que estábamos viviendo de las rentas de la pasada temporada. Estaba claro que el grueso del flujo migratorio no se decantaba por estos territorios.
La sesión de anillamiento durante la noche del 14 de noviembre transcurría por los mismos derroteros. Un porcentaje alto de becadas adultas caían en la red, cercano al 90%. Entre ellas, dos aves anilladas el 15 y 18 de noviembre de 2020 en la misma pradera, demostrando una vez más el extraordinario sentido de la orientación y fidelidad a su lugar de invernada, pero además una precisión de reloj suizo, ya que regresaban al mismo lugar donde habían sido marcadas justo un año antes.
El estudio de la muda en el plumaje del ala junto a la información que teníamos por haber sido capturada con anterioridad nos permitía calcular que para uno de los ejemplares era por lo menos el cuarto otoño que visitaba la zona, una auténtica superviviente.
Sin embargo, el panorama a partir de las 11 de la noche iba a cambiar radicalmente, porque empezamos a notar una presencia masiva de becadas concentradas en grupos, becadas muy inquietas, que se volaban enseguida. Alguna iba cayendo en la red y curiosamente todas eran individuos jóvenes y de escaso peso. Mientras anillábamos las que caían en la red otras se iban posando en los alrededores, estábamos asistiendo en vivo y en directo a la maravilla de la migración. Por fin el Rock & Roll que esperábamos.
Tras casi dos baterías gastadas y seis horas de patear prados a la una de la madrugada hacíamos balance de la noche, comprobando que se acababa de pulverizar el récord de avistamientos de becadas de los cuatro años que llevamos anillando en La Casa, con unas cuantas que también se fueron marcadas. Una noche para recordar por muchos años.
El resto de la semana ha sido más contenido, por lo que una buena parte de esta fuerte ola migratoria suponemos que se habrá ido hacia el sur, buscando sus lugares de invernada. Los números discretos de becadas encontradas con los perros durante los censos así lo certifican, un buen número de becadas paran a repostar y siguen su camino.
Las previsiones meteorológicas para los próximos días anuncian unas condiciones realmente favorables para la migración, por lo que es de esperar nuevos golpes en próximas fechas.
Seguiremos informando.
P.D. Como curiosidad podemos observar las siguientes fotos de una becada juvenil con una característica en el plumaje que no suele ser habitual en estas aves. Se trata de las denominadas barras de crecimiento, unas marcas que pueden aparecer en los pájaros cuando se produce un cambio metabólico durante la fase de crecimiento de las plumas, causado por estrés, déficit de alimentación, etc…En esta becada se localizaban de forma simétrica a lo largo de las dos alas.
Avanza el mes de noviembre y con él las fechas de la migración de las becadas. De momento el grueso del flujo migratorio parece que pasa de largo y estamos percibiendo poca alegría, tanto en el monte como en las praderas, aunque en estas últimas jornadas se atisba algo más de movimiento.
A pesar de que todavía la muestra es muy pequeña, en estas primeras fechas sí hemos observado cierta tendencia entre las becadas capturadas, resultando que el 75% de estos ejemplares son individuos adultos. De hecho, tres de las becadas que han entrado en la red ya habían sido anilladas el año pasado, algunas capturadas prácticamente en el mismo palmo de terreno, demostrando una vez más la querencia de estas aves a volver a los mismos lugares de invernada, lo que conocemos con el término de filopatria.
Con mucha prudencia podríamos empezar a considerar que este fenómeno podría estar causado por el hecho de que Garralda sea una reserva de caza y por ello hay más becadas supervivientes al final del invierno que vuelven al año siguiente a las mismas praderas. En cualquier caso es algo que habría que confirmar a lo largo de esta temporada y las siguientes.
Lo que sí venimos confirmando es que los prados no están en las mejores condiciones de humedad a pesar de las lluvias de las últimas semanas, unido a que se aprecia que el número de topillos es espectacular, para disfrute de los zorros y rapaces nocturnas y desesperación de los ganaderos. Su rastro en las praderas es notable y está por ver las consecuencias sobre las becadas.
Por lo demás, se acercan las fechas clave de la migración y permanecemos expectantes en la Reserva para el estudio de la becada. Seguiremos informando.
Se cernían nubarrones negros amenazando la celebración de las primeras Jornadas de la Becada en Garralda. Finalmente no fueron para tanto, el tiempo nos dio una tregua e incluso la suave lluvia caída fue una aliada después de las semanas de sequía padecidas. Así, podemos calificar de rotundo éxito el de este pasado fin de semana.
Los hayedos de Garralda se vistieron con sus mejores galas para recibir a los visitantes que se acercaron al valle de Aezkoa para disfrutar de dos días con la pasión de la becada o sorda en el punto de mira.
El sábado a las ocho de la mañana la plaza del ayuntamiento de Garralda era el lugar de encuentro para los aficionados a la cinofilia, con la apertura de la XIV edición del Máster CCB de perros de muestra, que por primera vez se iba a disputar en los terrenos de La Casa de la Becada. Los más de treinta ejemplares de setter inglés venidos de todo el norte de España y Andorra se iban a repartir en dos zonas o baterías, en las cuales su trabajo iba a ser juzgado en turnos de treinta minutos. En ese tiempo los canes, corriendo en parejas, debían demostrar su oficio y pasión por la becada, tratando de encontrar la emanación de algún ave y quedar en muestra. Si después de esto lo jueces consideran que el perro ha realizado un recorrido en la máxima nota le otorgarán la calificación de Ejemplar Altamente Cualificado.
Sin embargo, la jornada discurrió con poca densidad de becadas y tan solo Dana, una setter inglés venida de Andorra y propiedad de Miguel Moreno, pudo encontrar y bloquear una sorda, calificando los jueces su trabajo con un 1º EXCELENTE.
En la jornada dominical, el temporal anunciado provocaba que hubiera menos perros inscritos, pero la expectación seguía por todo lo alto ante la sospecha de que la noche anterior se hubiera producido una entrada de becadas. Y las expectativas se cumplieron, porque un buen número de ejemplares fueron capaces de demostrar su valía encontrando y mostrando estas aves, para regocijo de sus propietarios y público.
Así, en la Batería A, Olaf Reina de los Pirineos, del navarro Ricardo Cornago conseguía un 1º MUY BUENO, mientras que en la batería B era otro setter inglés, en este caso alavés, el que alcanzaba la máxima calificación en este tipo de concursos, un EAC. Se trata de Mostitxualde Laster, de Ikatz Pérez de Arriba. En este misma batería Dana volvía a repetir el éxito de la jornada del sábado con un 2º EXCELENTE.
A continuación Mostitxualde Hil y Mostitxualde Lur, también de Ikatz Pérez de Arriba y Lor de Castrocan, del gallego Miguel Montoiro, todos con la calificación de MUY BUENO.
Tras la prueba, el bar Errotaberri de Garralda albergaba la entrega de premios y el rapport o resumen de la prueba, emitido por los jueces del Máster CCB Faustino Alonso, Jordi Barbeta, Xavier Álvarez y José RamónLavin.
Si los perros eran protagonistas por la mañana, las charlas del sábado por la tarde no se quedaron atrás y con numerosa asistencia de aficionados a la caza y naturaleza, tanto de la zona de Garralda como foráneos, se habló largo y tendido alrededor de la becada en los locales de la sociedad La Garraldina.
Abrió las jornadas el alcalde de Garralda, Gurutz Gorraiz, pasando la palabra a la Consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, Itziar Gómez, quien destacó este proyecto como pionero en Europa Occidental, poniendo el valor la ganadería tradicional y la explotación sostenible de los bosques del Pirineo navarro como garantes de la conservación del hábitat para especies como la becada. También resaltó la contribución de este tipo de proyectos al desarrollo turístico de los valles pirenaicos. Por último, indicó el compromiso de su Departamento con esta iniciativa, apoyando económicamente la colocación de dispositivos de seguimiento por satélite de las becadas que visitan La Casa de la Becada de Garralda durante la temporada 2021/22.
Acto seguido se emitió el documental “El vuelo de la becada”, grabado en Garralda por Javier Gónzalez Purroy, siguiendo con la charla de David Gonçalves, de la Universidad de Oporto y experto en gestión de la becada, quien insistió en la importancia de la colaboración de los cazadores en todos aquellos estudios que persigan una gestión sostenible de las especies cinegéticas a largo plazo. De acuerdo con la información obtenida por las distintas asociaciones de cazadores europeas en los últimos veinte años las poblaciones de becadas del Paleártico Occidental siguen una tendencia estable, con altibajos dependiendo de las circunstancias propias de cada temporada. Al mismo tiempo mostró como la proporción de sexos o edades de las becadas cazadas pueden variar en función del punto de la ruta migratoria en la que han sido capturadas.
Por último, las charlas concluyeron con la presentación de José Baldó, juez de perros de muestra, reconocido cinófilo y titular del afijo Piedrallada, quien hizo un recorrido sobre las características que a su juicio deben tener los perros de caza y competición, lo que dio lugar a un animado debate.
Para concluir las jornadas se hizo una salida nocturna al campo, mostrando a los interesados las labores de anillamiento que se llevan a cabo en La Casa de la Becada, con un buen resultado de capturas.
Desde la organización de las Jornadas (Club de Cazadores de Becada y Ayuntamiento de Garralda) queremos agradecer a los participantes, jueces y público su presencia, la buena disposición, compañerismo y deportividad demostrada a lo largo del fin de semana, así como al Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra por el soporte a iniciativas de este tipo.